Hay días malos.
Hay días pésimos y hay días aún peores.
Hay días en los que piensas que lo mejor hubera sido que no levantarte de la cama.
Hay días donde parece que el mundo entero conspira contra ti.
En otras palabras: Hay días para el olvido.
¿O no?
Los días así siempre van a existir, eso es un hecho. Hay quienes opinan que lo mejor es ponerles buena cara, ser optimista y pensar que mañana vendrá un día mejor.
Yo no.
Yo ando con mi jetota todo el pinche día para que al menos ya nadie tenga la ocurrencia de molestarme más, hay límites. Quisiera que cuando de verdad tengo un día verdaderamente del fuck me pudiera poner sobre la cabeza mi nube de lluvia personal (rayos y truenos incluidos).
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