jueves, 20 de junio de 2013

Soliloquio

Llega un momento en la vida en que tienes que cerrar los ojos, apretar los dientes y aventarte al vacío…

¿Ir a lo seguro o arriesgarte?

Qué pasa cuando te das cuenta que lo que tienes o estás viviendo no te llena en realidad.

¿Miedo al cambio o miedo al conformismo? ¿Qué es peor?

Recuerdo que cuando tenía 20 años quería hacer mil cosas, aprender mil cosas, ¿qué pasó?

Nada como una madre que te dice: “estamos contigo” pero desaprueba tajantemente lo que quieres hacer.

¿Será la crisis de los treintas la que habla?

 
Nota al pie: Creo que debería dejar de hablar sola, mis rasgos esquizofrénicos podrían empeorar.

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